Entre ellos las afeitadoras son un infalible y el aliado perfecto a la hora de mantener la barba cómoda y prolija. Pero, ¿cómo sacarle partido a su uso para obtener los mejores resultados? Para muchos hombres el afeitado es una rutina a la que no prestan demasiada atención mientras que para otros, es un ritual que merece su tiempo. Cualquiera sea el caso existen tips y técnicas para un afeitado perfecto.
Ya sean máquinas con cuchilla o afeitadoras eléctricas, cada una tiene su propia técnica y ofrece diferentes acabados. Las primeras son las más populares y actualmente vienen diseñadas para conseguir un afeitado perfecto, incluyendo barras deslizantes para simplificar el proceso y ofrecer resultados en tiempo récord.
Por su parte, las afeitadoras eléctricas son la opción preferida de aquellos que tienen la piel sensible. Requieren la piel seca para su correcto funcionamiento y cuando se trata de un vello fuerte, es aconsejable utilizar las de cabezales giratorios que aportan un ligero y suave masaje en la piel y los músculos, facilitando el afeitado correcto.
Consejos para afeitado perfecto
Dejá que la piel “despierte”. No es recomendable afeitarse a primera hora cuando la piel aún permanece hinchada y adormecida. Lo mejor es tomarse unos 10 minutos y así estará preparada para un buen afeitado.
Dale unos días de descanso a la piel. No se aconseja afeitarse todos los días porque puede irritar demasiado.
Comprobá el estado de las cuchillas. En caso de una afeitada diaria es recomendable cambiar el cabezal una vez a la semana, es imprescindible para prevenir rojeces, cortes e irritaciones en la piel.
Nunca a contra pelo. Si se comienza el afeitado a contrapelo, la piel se irritará y no se logrará un buen resultado. En cambio deslizando suavemente en el sentido en el que nace el pelo y aplicando pasadas cortas y suaves, la afeitada será perfecta. Se aconseja hacer el contrapelo únicamente si es necesario y sólo en las segundas pasadas.
Refrescá la piel. Una vez finalizado el afeitado, es aconsejable aclarar la piel con agua fría para aliviarla y cerrar los poros y, posteriormente, aplicar una loción hidratante.












