El pasado noviembre el Gobierno liberó en su totalidad la importación de productos electrónicos para empresas distribuidoras y comercializadoras. Con esta medida busca una mayor competencia para que bajen los precios. En el siguiente informe, analizamos en detalle cómo afecta la medida el negocio del canal.
La medida de la Secretaría de Comercio retiró las “licencias no automáticas” para la importación de celulares, aires acondicionados, microondas, televisores y equipos de audio y DVD.
De esta manera, la importación de diversos artículos electrónicos dejó de estar sujeta al sistema de “licencias no automáticas” y pasó a operar bajo “licencias automáticas”, de acuerdo a la Resolución 898-E/2017 resuelta por el Secretario de Comercio, Miguel Braun, publicada en el Boletín Oficial.
La medida avanza en la “normalización” del comercio exterior de una serie de productos como: aires acondicionados split, no split y portátiles; unidades condensadoras y evaporadoras para aires acondicionados Split; microondas; televisores; DVD para hogar y DVDR de seguridad; equipos de música (portátiles y fijos); stereo para autos; sintonizadores; parlantes con 2 o más salidas por caja; MP3; teléfonos celulares; y videomonitores.
Desde el Gobierno aseguran que “no se trata de una reducción de aranceles, sino de la normalización del comercio en línea con el acuerdo firmado hace dos semanas con el sector local de la electrónica y el gobierno de Tierra del Fuego”.
Esta medida fomentará la competitividad del sector y promoverá una reducción de los precios de la tecnología para los consumidores, muchos de los cuales ahora optan por comprar en Chile o Miami.
El Gobierno de Mauricio Macri, el gobierno fueguino, la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE) y la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) habían firmado un acuerdo para mejorar la productividad y reducir los precios en favor de los consumidores que acceden a la tecnología. El mismo, implica la reducción gradual de impuestos internos que fue anunciada el miércoles, un acuerdo salarial, la reducción de una tasa provincial y de los costos portuarios, entre otros aspectos.
Desde AFARTE, Federico Hellemeyer, su presidente, manifiesta: “Nos parece importante destacar la voluntad de diálogo y conciliadora del sector sindical, los gobiernos Nacional y provincial y de todos los que participaron de este acuerdo, cuyo objetivo es asegurar las bases de un trabajo conjunto, articulando al sector privado y el público, que profundice la modernización y competitividad de las estructuras productivas, manteniendo el nivel de actividad y los puestos de trabajo”.
La voz del canal
Para Rodolfo Guazzaroni, Gerente General de Naldo, “la apertura de importaciones ha contribuido a un mayor lineal de productos para que el consumidor pueda elegir, sobre todo en temas tecnológicos donde siempre se busca lo último o el mayor abanico de posibilidades. Además, indirectamente, contribuirá a una mayor estabilización de precios”.
El ejecutivo cuenta que Naldo está participando más activamente en las importaciones, “fundamentalmente complementando lineales que no nos podemos abastecer con nuestros proveedores nacionales, permitiendo así ofrecer mejores alternativas de compras a nuestros clientes y vestir nuestros locales con todo el abanico de productos posibles para estar a la altura de los mejores retail del país”.
Por su parte, Enzo Coralloni, Socio Director de Grupo Marquez, ve con buenos ojos las recientes medidas adoptadas por el Gobierno. “Nos da la posibilidad de competir pudiendo traer nuestros propios productos. Impacta en el negocio del retail ya que lo hace más competitivo, por lo cual mejorará la calidad de los productos y nos pondrá en igualdad con los monopolios nacionales”.
Y agrega: “Los beneficiarios son los consumidores finales ya que tendrán la oportunidad de pagar mucho más barato y por mayor calidad. Esto será un beneficio para el sector, ya que a precios más bajos el público consumirá más”.
Por último, Carlos Baum, Director de la consultora IngEmp Argentina, expone: “Si la apertura se realiza con un control estricto bajo normas que regulen un mercado a niveles de precio y surtido, es positivo, ya que esto permite al canal retail poder tener una competencia mucho más igualitaria a niveles regionales y evita la concentración en las grandes cadenas en el interior del país. Por lo tanto, puede llegar a tener ciertos beneficios a niveles de oferta”.
Podés ver la nota completa y el resto de las notas en la revista digital de enero de Enretail.
